------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Este blog pretende ser solamente un espacio donde poder contar cosas, un muro donde escribir ideas, un tablón donde colgar pensamientos. Cosas, ideas, y pensamientos de todo tipo, cosas, ideas, y pensamientos que me interesen y me llamen la atención, y hacerlo por supuesto a mi manera. Es posible que lo que se escriba no tenga mucho sentido e incluso en numerosas ocasiones sea estúpido, y no importa, cada cual es libre de leer o dejar de hacerlo si cree que no vale la pena. Es más, es ésa la verdadera intención. Más que contar el día a día de mi vida lo que quiero hacer es contar el día a día de mis inquietudes, contar todo aquello que antes hacía saber a mis amigos cuando nos veíamos y luego se convertía en tema de conversación y discusión, en debates apasionados. Ahora que no nos encontramos tan a menudo y no tenemos tales oportunidades, la opción de la Red y los blogs puede ayudar a que sigan existiendo tales. Espero que así sea.

------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
SI ENTRAS Y NO COMENTAS ES COMO SI NO ENTRARAS.
------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

martes, 10 de noviembre de 2009

Otro cumpleaños.

Estamos de celebración esta semana. Por un lado la ya comentada caída del muro de Berlín, un jovenzuelo que cumple ya 20 tacos, y por otro, el aniversario de Barrio Sésamo, que cumple ni más ni menos que 40, entrando ya en la famosa pitopausia, pero dando mucha guerra todavía.
Todos los que leéis, algunos más y otros menos, pero todos en definitiva, habéis, y hemos, me incluyo, crecido con Barrio Sésamo. ¿Quién no se ha reído alguna vez con Coco o con el Monstruo de las Galletas ? Quién no se ha preguntado de qué cojones vivía este último si todas las galletas iban al suelo cuando comía? ¿Quién no se ha desesperado nunca con Epi y Blas?

Todos esos muñecajos de trapo, con su propio carácter y sus manías, han enseñado y entretenido a niños de todo el mundo durante cuatro décadas y han supuesto una gran ayuda para las madres de todos ellos, que podían dejarlos al lado de la Tv y desentenderse de ellos por un rato. Han creado escuela en definitiva y sinceramente me siento orgulloso de ser de la generación del Sésame Street, aunque ello suponga que demuestre cuan viejo soy ya.
Un poco de pena sí que siento por los nuevos infantes de este nuestro mundo que han dejado de ver, no por voluntad propia sino por imposición televisiva, casi dictatorial, programas tan didácticos como el que estamos tratando y los han cambiado por los Shin Shanes, de escatológico humor oriental, los Teletubies, de dudosa virilidad o más bien dicho de más que sospechosa pérdida ólica, o las Hannas Montanas y demás, productos de márketing televisivo-musical condenados a caer y recaer en futuros no muy lejanos en las clínicas de implantes o de desintoxiación.

No hay comentarios: